- tabaco
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Tal vez las primeras noticias que tengamos de lo que más tarde se denominaría tabaco, son las que encontramos en el diario de Colón, concretamente el 6 de noviembre de 1492, donde se dice que dos cristianos se cruzaron con unos hombres que llevaban un tizón en la mano y «yerbas para tomar sus sahumerios que acostumbraban». Más adelante se cuenta que los indios caribes llamaban a esas hierbas cohiva, nombre que tienen hoy unos famosos puros habanos. Por cierto, la palabra puro no es sino la reducción de la expresión cigarro puro ( cigarro), es decir, sin papel. Los ingleses adoptaron la otra parte del compuesto y al puro lo llaman cigar. El tabaco llegó a Francia en 1560 ( nicotina) y en España e Inglaterra se empezó a fumar en el último tercio del siglo XVI.Sobre el origen del nombre existen muchas dudas. Hay quien piensa que es una deformación de Tabasco, nombre del actual estado mejicano situado en la costa Sur del Golfo de Méjico, lugar en el que por primera vez los españoles habrían visto fumar, aunque tiene más visos de ser cierta la hipótesis del origen no americano del término.Sabemos que se denominaban tabacco y atabaca, palabras de origen árabe, ciertas plantas o hierbas medicinales que tenían efectos sedantes o somníferos y se utilizaban en España e Italia bastante antes del descubrimiento de América. Es más que probable que los conquistadores españoles trasladaran estos nombres a las plantas que fumaban los indios y que causaban el mismo efecto que las que ellos conocían: lo mismo sucedió en palabras como piña, que, por su semejanza con el fruto de los pinos, emplearon para denominar al ananá o ananás, o mezquita, con la que, en referencia a las únicas edificaciones religiosas no cristianas que ellos conocían, denominaron a los templos que allí encontraron.
Diccionario del origen de las palabras. 2000.